En declaraciones a Servimedia, Manzano subrayó que unas 150 de estas familias ya viajaron a Rumanía para conocer a los niños que las autoridades rumanas les habían asignado una vez iniciados los correspondientes expedientes de adopción.

La situación se ha agravado aún más desde el pasado 5 de febrero, fecha en la que el Gobierno rumano derogó la ley por la que se podrían resolver alguos casos atendiendo a criterios de excepcionalidad (niños mayores, grupos de hermanos, etc.).

El presidente de la asociación culpa directamente de esta situación a la eurodiputada británica Emma Nicholson, nombrada relatora de la Unión Europea para Rumanía, cuyo ingreso en la UE está previsto para 2007.

Según Fernando Manzano, esta eurodiputada "rechaza de plano" la adopción, hasta el punto de que la pasada semana viajó a Bucarest para "volver a exigir al Gobierno rumano que no salga ningún niño e sus orfanatos".

DEBATE EN RUMANÍA

Entre tanto, el Gobierno de Rumanía, cuyo primer ministro es Adrian Nastase, ha anunciado la tramitación de una nueva ley sobre adopciones internacionales para el próximo mes de mayo, aunque "el levantamiento de la moratoria no sería efectivo hasta al menos uno o dos años", advirtió Manzano.

Este asunto ha generado un polémico debate político en Rumanía, que en 2004 también celebra elecciones. Según denuncia ACABAR, la oposición rumana acusa al Gobierno de es país y a las familias extranjeras de "traficar con los niños".

Ante la situación de "indefensión", "indefinición" y "zozobra" que soportan las familias españolas atrapadas en esta maraña burocrática, la Asociación Coordinadora de Afectados por el Bloqueo de Adopciones en Rumanía ha pedido la mediación del Gobierno español.

"Pedimos a las autoridades españolas que viajen a Rumanía para intentar resolver este grave problema que afecta a tantas familias españolas, que no saben a qué atenerse y descnocen si finalmente podrán traer a España a los niños que les fueron asignados", añadió Manzano.