Entre las medidas propuestas se encuentran la incorporación de más orientadores en los institutos de Educación Secundaria, desarrollar la figura del psicólogo educativo, garantizar un tiempo de espera máximo de 15 días para primera consulta de salud mental infanto-juvenil y de un mes para las revisiones. Además del incremento del número de plazas en centros educativos terapéuticos en al menos un 30% en el plazo de seis meses.

Rubiño dijo que “son muchas las voces de alarma que se están levantando preocupadas por el aumento de conductas autolesivas en los colegios” y añadió que “ante esto, aunque los equipos educativos y de protección están haciendo todo lo posible para acompañar a los niños y niñas, en este momento con la voluntad no basta”. A su juicio, “hacen falta recursos, medidas y apoyo por parte de la Comunidad de Madrid, y es lo que proponemos con esta iniciativa”

Más Madrid pide “el aumento del equipo de orientadores en los institutos ya que la mayoría no cumplen las ratios o están muy por debajo” y también “aumentar en dos orientadores y reforzar la coordinación con los centros educativos terapéuticos y los centros de salud mental para que se doten de mayor número de profesionales”.

“Instamos también al Gobierno a incorporar la figura de psicólogo educativo en los institutos”, dijo Diego Figuera, quien manifestó que “la población joven padeció el confinamiento más prolongado al no aprobarse su salida hasta finales de abril de 2020”.

Además, indicó, “en los últimos meses ha aumentado la preocupación por las cifras de suicidios e intentos de suicidio y las autolesiones en la población joven, y se ha señalado al ámbito educativo como un lugar desde el cual poder desarrollar estrategias para tratar de abordar este problema”.