Uno de los encerrados informó a Servimedia que "no nos moveremos de aquí hasta que el Gobierno tome cartas en el asunto. La gente está dispuesta a realizar lo que sea". Aseguró que muchas de las persoas encerradas han pedido en sus empresas diez días de vacaciones para realizar el encierro.

La decisión de iniciar este encierro, que comenzó a las ocho y media de la mañana, ha sido adoptada tras la decisión de ayer del Consejo de Ministros de no intervenir PSV, con lo que el juez que lleva el caso podría levantar la suspensión de pagos y la cooperativa podría entrar en quiebra.

Según informaron a esta agencia los afectados, a primeras horas de la mañana los encerrados eran un grupo de unas 50 prsonas, pero según va pasando el día se han ido sumando más cooperativistas y prevén que al final del día lleguen a ser unos 200.

Los encerrados pertenecen a diversas promociones de PSV y entre ellos hay quienes piden que se les devuelva el dinero que ya han entregado y otros que lo que quieren es que se terminen sus viviendas para poder vivir en ellas.

Los cooperativistas atraviesan en estos momentos una difícil situación económica, ya que, según explicó a esta agencia uno de ellos, "estamos recbiendo cartas de los bancos en las que se nos requiere el pago de las letras, amenazándonos con embargarnos si no lo hacemos".

Aseguró que son muchos los cooperativistas que ya han recibido el requerimiento de pago de las letras por parte del banco "para algo que no se va a construir" y que los demás están a la espera de recibirlas. Según este afectado, entre los bancos que están enviando las cartas figuran Banesto, Banca March y Argentaria.

"Nosotros hemos dado ya tres millones de pesetas y teneos otros cuatro firmados en letras que vencen cada tres meses, y estas letras van venciendo y se van acumulando y nos amenazan con embargarnos", explicó el cooperativista de PSV.