Los paradores menos afectados por la huelga fueron los de Carmona (Sevilla), Alarcón (Cuenca) y Alcañiz (Teruel). Los servicios mínimos, que incluían el mantenimiento de maquinaria y una persona para tender la recepción y el teléfono, funcionaron con normalidad.

La huelga afectó al rey Juan Carlos, cuyo séquito tuvo que ser desviado del parador "Hotel Atlántico", en la capital gaditana, a un hotel de Puerto de Santa María. El rey viajó a Cádiz para inaugurar, el domingo, la Gran Regata Colón 92, dentro de los actos del Quinto Centenario.

La empresa y los sindicatos reanudarán la próxima semana la negociación del convenio colectivo. Las centrales amenazan con nuevos paros en caso de que no hay acuerdo. Piden una subida salarial del 8 por cien, jornada semanal de 37 horas y el aumento de los pluses de antigüedad.

Este último punto es el que mantiene paralizada la negociación, ya que la empresa considera necesario congelar dichos pluses, a fin de racionalizar los gastos de personal, que actualmente suponen el 52 por ciento del total.

La empresa afirma que la aceptación de las reivindicaciones sindicales haría que la red de paradores, que en 1991 obtuvo unos beneficios de 1.040 millones e pesetas, entrase en pérdidas durante 1992.

Según los sindicatos, los sueldos brutos anuales de los trabajadores de paradores oscilan entre 1.164.200 pesetas para camareras de pisos y 1.862.026 para contables y jefes de departamento.

De acuerdo con sus estimaciones, la congelación de la antigüedad supondría, en el plazo de diez años, una pérdida de 2.120.370 para los peor pagados y de 2.950.346 para los mejor retribuidos.