Fuentes de la Consellería de Medio Ambiente declaron a Servimedia que estos días se han convertido en la "semana negra" de los bosques valencianos, ya que hasta el pasado viernes sólo habíanardido en esa comunidad unas 2.000 hectáreas, por las más de 8.000 que se han perdido en los últimos cuatro días.

Representantes de la Dirección de Recursos Forestales de la Generalitat declararon que hay constancia que varios de estos incendios han sido provocados aprovechando los numerosos focos recartidos por toda la comunidad. Varios desaprensivos han sido detenidos ya en las tres provincias valencianas y entre las razones que provocaron los focos están la especulación, quema de pastos y piromanía

En las operaciones de extinción han participado 4 hidroaviones, (tres de la Generalitat valenciana y uno de la de Catalunya), 16 brigadas de los parques del Consorcio Valenciano y centenares de guardias forestales, Protección Civil y voluntarios de los pueblos implicados.

Numerosos núcleos de población han tenido que ser desalojados en estas dos zonas ante la inminente amenaza del fuego, entre ellos varias colonias de chalés de Náqueda y Calles, así como a los monjes del monasterio de Porta-Coel, en Valencia.

Asímismo, el Icona ha enviado desde Cuenca varias unidades de apoyo contra incendios, a las que se han sumado unos 300 soldados y guardias civiles.

De los más de 50 focos de fuego detectados desde el pasado viernes sólo tres permanecen sin controlar, lo que no quiere decir que algún frente pueda reproducirse como de hecho ha sucedido hoy, según informaron fuentes de la Consellería de Medio Ambiente del Ejecutivo valenciano.

Las zonas que más han sufrido los efectos del fuego sn las de Parcent-Benigembla, en Alicante, donde han sido arrasadas unas 3000 hectáreas, y Xovar, Eslida y Azuquécar, en Castellón, donde han ardido cerca de 2000.

La provincia más afectada por los incendios desde el fin de semana ha sido Alicante donde sólo hasta últimas horas del pasado domingo se habían perdido ya casi 3.700 hectáreas.

EN BALEARES, CONTROLADOS

Por otra parte, los responsables de la extinción de dos de los cuatro incendios declarados desde el pasado viernes en Baleares y que an permanecían en actividad esta mañana estarán prácticamente controlados esta tarde.

El descenso de la velocidad del viento permitió la intervención hoy de los dos hidraviones que ayer tuvieron que volver a sus bases ante la imposibilidad de maniobrar. Una de estas unidades aéreas acudió desde la base aérea madrileña de Torrejón de Ardoz.

Los dos incendios que permanecían en actividad a primera hora de esta tarde están localizados al noroeste de Mallorca, en las localidades de Astá y Selva, en lazona de Caimari. En el primero han resultado quemadas más de cien hectáreas de monte bajo y entre los otros tres completan unas cincuenta hectáreas más de pinares.

En los dos incendios mallorquines intervinieron todos los efectivos disponibles en la isla que, según informó la dirección de Interior de Baleares, forman 15 dotaciones de bomberos y entre 7 y 10 unidades de apoyo de la Consellería de Agricultura y Pesca, Protección Civil de Baleares, así como un centenar de soldados y varias decenas de volntarios.