Así lo anunció el propio Congreso un rato después de que entraran los últimos visitantes de este sábado. Casi a las 20.00 horas, la vicepresidenta tercera y el secretario cuarto de la Mesa del Congreso, Gloria Elizo y Adolfo Suárez Illana, respectivamente, fueron los encargados de cerrar la Puerta de los Leones.

Después, los trabajadores de la Cámara presentes dedicaron un afectuoso aplauso a Suárez Illana, que con ese gesto de dar por concluida esta 25 edición de las Jornadas de Puertas Abiertas del Congreso se despedía de su etapa parlamentaria, días después de anunciar que deja su escaño para regresar al ejercicio de la abogacía.

En la primera jornada, el viernes, 2.400 personas visitaron el Congreso, y este sábado fueron muchas más, hasta superar las 6.000 en total, un goteo constante de personas pero lejos de las colas y cifras de años anteriores a la pandemia, por ejemplo en 2019, cuando más de 15.000 personas visitaron la Cámara.

La felicidad de algunos de los visitantes se reflejaba en las sonrisas que dibujaban sus caras cuando se veían en las pantallas gigantes del Hemiciclo. Los efusivos saludos a la cámara y las fotos a las pantallas en las que se veían, se entremezclaban con los ciudadanos que estaban atentos a las explicaciones de diputados de PSOE y PP que, durante la jornadas, han pasado momentos por el Hemiciclo.

Muchos eran parlamentarios ‘desconocidos’ para el público, pero ellos respondían a todas las preguntas que “con mucho respeto”, decían, les trasladaban los ciudadanos. Muchas de ellas sobre cómo es el trabajo desde el escaño pero, principalmente, cómo es el sistema de votación.

Un clásico en las preguntas y las curiosidades, principalmente de los más mayores, eran los impactos de los tiros del teniente coronel Antonio Tejero en el intento del golpe de Estado de 1983, y las impresiones de que el Hemiciclo es más pequeño de lo que se ve por la tele.

Y un clásico que no se producido esta vez, como tampoco en la pasada edición debido a la covid, era agasajar a los ciudadanos con un chocolate caliente o un caldito. Tampoco había obsequio alguno para los visitantes.

Quién sí se dejó ver, como en años anteriores cuando formaba parte de la Cámara, es la ministra de Defensa, Margarita Robles, porque es un día “muy importante” ya que se está “celebrando una manera de celebrar la Constitución, que nos está dando este marco de convivencia tan importante”.

Hasta los equipos de emergencia, sanitarios y bomberos, destinados en el Congreso aprovecharon para conocer los interiores de la Cámara Baja y hacerse fotos entre los escaños de sus señorías, unos escaños en los que casi toda la jornada de hoy, algunos repitiendo desde ayer, estuvieron diputados como los populares Alberto Casero, Jaume Istúriz, o Juan Antonio Callejas, y los socialistas Isaura Leal, Aurelio Zapata, Gema López, Manuel Arribas o Valentín García, además de algunos otros representantes de otros grupos.

Suárez Illana fue sin duda uno de los protagonistas de la jornada, con colas para hacerse fotos con él y, por su parte, toda la disposición para que "nadie se quede sin una foto”. Él mismo explicó que se marcha con una “inmensa gratitud” por la despedida que le hizo la presidenta, Meritxell Batet, y la mayoría de diputados, y con el mensaje de que la “concordia es posible y es posible entendernos”, en un momento en el que la tensión ha crecido tanto en el Hemiciclo que eran muchos los ciudadanos que estos días han pedido respeto y educación a los diputados en sus debates.

VISITA

Para la visita, los ciudadanos accedieron por por la calle Zorrilla y, tras controles de seguridad, cruzaron el Patio de Floridablanca con dirección hacia la Puerta de los Leones, por la que accedieron al Vestíbulo de Isabel II, donde empezaba el recorrido y donde podían contemplar un ejemplar de la Constitución de 1812.

Desde el vestíbulo principal los visitantes pasaron al Salón de Conferencias, conocido como Salón de los Pasos Perdidos, en el que los guías de la Cámara acompañados por diputados les ofrecieron una breve explicación del recorrido completo. El centro de la estancia es donde se reciben las visitas institucionales y se celebran otros actos como la recepción del Día de la Constitución.

El itinerario prosiguió en el Escritorio del Reloj, donde el protagonista, que da nombre a esta sala, es el reloj astronómico, construido por Alberto Billeter en 1857. Tras recorrer los escritorios los visitantes llegaron al Hemiciclo o Salón de Sesiones, donde los grupos parlamentarios debaten temas de interés general.

Ya en la primera planta del Palacio, los visitantes entraron en la Sala Mariana Pineda, la sala 'verde' donde se reúne la Junta de Portavoces y la comisión de secretos y la galería de retratos, un recorrido histórico a través de los presidentes del Congreso de los Diputados pintados por algunos de los artistas más relevantes de los siglos XIX y XX.

Para concluir la visita, los ciudadanos bajaron al nuevo espacio habilitado en el sótano del Palacio, que se estrenó en las puertas abiertas de 2021 con una exposición sobre Clara Campoamor por el 90 aniversario del voto femenino, y que desde este mes de diciembre acogerá la exposición permanente sobre las constituciones que han regido España.