Esta acampada tiene como finalidad protestar por la construcción del embalse burgalés, ya que Aedenat alega que "produciría un grave impacto medioambiental, al anegar áreas de gran valor natural, así como sobre el patrimonio histórico y arqueológico, al afectar a varios yacimientos arqueológicos y a los vecinos de Palacios de la Sierra".

Los membros de la asociación ecologista dudan de la utilidad de esta obra, "pues los regadíos a los que teóricamente iba a abastecer ya han sido descartados, no apareciendo ni en el Plan Nacional de Regadíos ni en los planes de regadíos de la Junta de Castilla y León".

Aedenat señala en un comunicado de prensa que la Secretaría General de Medio Ambiente, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, devolvió a la Confederación Hidrográfica del Duero el estudio de impacto ambiental del ambalse, al advertir na serie de deficiencias y no ver claros los fines del embalse.