Nieto calificó de "terrible" la siniestralidad laboral que sufre España, que coloca a nuestro país a la cabeza de Europa, con 14 accidentes por cada 100.000 trabajadores, frente a una media de 5 accidentes en la Unión Europea (UE), al tiempo que denunció que la ley de salud laboral no ha contribuido a solucionar el problema.

Según Nieto, entre 1990 y 1997 se registraron más de cinco millones de accidentes con baja en el centro de trabajo, de los que 92.420 fueron graves y 9.220 mortales, a los que hy que sumar los 3.200 trabajadores muertos "in itinere", es decir, al ir o regresar de su trabajo. En el primer semestre de este año, los muertos en accidentes en el puesto de trabajo han sido 504.

Nieto, que denunció que cada cada día laboral se registran en España más de cuatro accidentes, explicó que estas cifras, además de un gran sufrimiento humano, suponen unos costes para la sociedad muy elevados. Así, las jornadas de trabajo perdidas por accidentes de trabajo en la década de los 90 fueron 130, millones, cifra muy superior a los 86 millones de jornadas perdidas por huelgas.

El coste que suponen para el conjunto de la sociedad estos accidentes es de unos 2,2 billones de pesetas al año, de los que, según Nieto, sólo medio billón aportan los empresarios a través de cuotas por accidentes de trabajo, y el resto el conjunto de la sociedad, lo que, a su juicio, es injusto.

Nieto indicó que los 19,2 billones de pesetas de gasto que han ocasionado los accidentes laborales en la década de los 90equivale a los presupuestos del Estado en educación, vivienda, infraestructuras e investigación juntos. A título de ejemplo, dijo que el año 1997 se cerró con 227.800 pensionistas por accidente de trabajo, con un coste a la Seguridad Social de 245.249 millones.

El responsable de CCOO insistió en que el problema no es la ausencia de normas, sino el incumplimiento de las mismas, y responsabilizó a los empresarios de ello, y también a las patronales CEOE y CEPYME por poner trabas al cumplimiento de la le de salud laboral. Aseguró que el 62% de los empresarios desconoce la existencia de esta ley.

GOBIERNOS Y JUECES

También cargó las tintas sobre los gobiernos, especialmente los autonómicos, por no controlar y sancionar a las empresas incumplidoras, y sobre los jueces y fiscales, por no perseguir de oficio los delitos contra la salud y la seguridad en el trabajo, lo que ha llevado a CCOO a personarse como acusación particular en todos los accidentes graves y mortales.

Nieto acusó a las administrciones autonómicas de haber dejado prescribir sanciones impuestas a las empresas infractoras en la década de los 90 por importe de 40.000 millones. A su juicio, hay que potenciar la Inspección de Trabajo con la contratación de 1.000 controladores laborales en 1999. Explicó que en España sólo hay un inspector por cada 27.000 trabajadores, mientras en Europa hay uno por cada 7.000 empleados.

Exigió la aprobación rápida del plan de choque en el que se está trabajando en la Comisión Nacional de Salud y Seuridad en el Trabajo y pidió a la Administración que no den obra pública a las empresas que no cumplen la ley. También defendió la necesidad de alcanzar un acuerdo tripartito sobre formación en esta materia, y de reducir la temporalidad en el empleo y limitar las subcontratas en la construcción.

Sobre esto último, recordó que CCOO está recogiendo 500.000 firmas para promover una iniciativa legislativa popular en el Congreso para poner límites a las subcontratación. Angel Cárcoba, del Gabinete de SaludLaboral de CCOO, que también intervino en la rueda de prensa, propuso la elaboración de un censo público de empresarios que incumplen la ley y provocan muertes de trabajadores, para que recaiga sobre ellos un estigma social.