En un comunicado, el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales señala que el objetivo del programa es incrementar las oportunidades de retorno al mercado laboral de los trabajadores desempleados con especiales necesidades económicas y dificultad para encontrar empleo.

Este programa comprende medidas activas de empleo gestionadas por los servicios públicos de empleo y, en su caso, una ayuda económica gestionada por el Servicio Público de Empleo Estatal.

En su origen sólo podían acceder a él los parados de larga duración mayores de 45 años, pero apartir de 2002 se incrementaron los colectivos beneficiarios a los discapacitados, emigrantes retornados y víctimas de violencia doméstica que a partir del año 2005 pasan a ser víctimas de violencia de género.

El número de participantes totales en el programa ha ido aumentando, desde los 14.709 de 2000 hasta los 56.422 de 2004. Por su parte, el gasto ha pasado de casi 11 millones de euros en 2000 a 163,1 millones en 2004,y a 214 millones previsto para el presente año.

Además de beneficiarias de la Renta Activa de Inserción, las víctimas de violencia son objetivo preferente en los programas de fomento de empleo, en los que se incentiva su contratación, mediante la bonificación de la cuota empresarial a la Seguridad Social del 65%, o 75% si es a tiempo completo, durante 24 mensualidades.

La medida empezó a funcionar en el año 2003, y es aplicable tanto para contratos indefinidos como temporales. Desde esa fecha se han suscrito un totalde 809 contratos con derecho a bonificación: 168 en 2003, 268 en 2004 y 373 hasta octubre de 2005.