La delegación de Hong Kong, formada por 31 personas, fue la primera en despegar del aeropuerto del Prat, a las 7.25 de la mañana, según explicaron funtes del COOB.

Los miembros de Alemania y Holanda también comenzaron a marcharse de forma escalonada, mientras que los de Suecia se fueron en un avión militar que puso a su disposición el ejército de su país.

Otras delegaciones, como la de Estados Unidos, partió también a lo largo del día de hoy rumbo a Nueva York y Atlanta. Un total de 69 deportistas británicos se marcharon a las 13.25 horas, mientras que 64 atletas de la delegación de Noruega lo hicieron poco después.

Para el traslado de ls primeras 2.000 personas de la familia paralímpica se utilizaron, a lo largo del día de hoy, 39 microbuses adaptados, 7 autobuses adaptados, 87 de piso bajo, 16 autocares adaptados y 7 convencionales.

La Villa Olímpica, que permanecerá abierta hasta el día 17, despidió a todos los atletas ayer con una fiesta que duró hasta el amanecer. Los deportistas pudieron disfrutar de varias horas de música después de una cena comunitaria celebrada en la zona central del complejo.

Después de regresar del esadio, una vez acabada la ceremonia de clausura, los atletas paralímpicos participaron en una fiesta amenizada por el Quintet Fibonacci, la orquesta Tràfic y All Víctor Productions. Un castillo de fuegos artificales dio paso a toda una noche de baile.