Sada afirmó que se procedió "de forma inmediata" a paralizarla producción y distribución de sus productos, así como la retirada de los mismos del mercado, algo que llevó a cabo con la colaboración de las autoridades sanitarias, según palabras de Rodríguez.

"Estamos trabajando para garantizar la calidad y seguridad de nuestros productos en un futuro y evitar que un incidente similar pueda volver a producirse", dijo el director de la empresa.

Javier Rodríguez garantizó, además, que la producción permanecerá paralizada "hasta que se pueda asegurar su calidad y lo autoricen las autoridades sanitarias". El director quiso tranquilizar a la población diciendo que en estos momentos no queda ningún pollo afectado por contaminación en las tiendas.

Grupo Sada, asegura en su comunicado que "lamenta profundamente lo sucedido" y que asumirá las responsabilidades necesarias ante los consumidores. Por el momento, la compañía de alimentos ha habilitado una línea de atención telefónica y un servicio de reclamaciones para atender a los afectados.