En la carta, Martínez Inglés afirma que "comprendo prfectamente que mi atípica actuación de las últimas semanas, tratando de cortar de raiz la 'presunta corrupción' descubierta dentro de IU, y en la que tu mismo estás involucrado por presidir la Fundación de Investigaciones Marxistas (entidad que 'presuntamente' ha trasferido ilegalmente 4 millones de pesetas al secretario general de Izquierda Republicana) ha podido dañar gravemente la imagen pública de nuestra federación de partidos".

"Lo lógico hubiera sido", ¡como no!, hacer lo que tu has hecho: traar de tapar todo el tinglado y echar una mano a tu 'esclavo político', el señor (es un decir) Isabelo Herreros", señala en el primer párrafo del escrito.

"Me doy perfecta cuenta", prosigue la carta, "que oponiéndome al comité central/federal del PCE (por mucho que cambien las palabras seguís siendo los mismos) que domina dictatorialmente Izquierda Unida, su criatura desvalida, y para el que el muro de Berlín continúa en todo lo alto, he cerrado drásticamente mis perspectivas políticas en esta formació/tapadera del stalinismo hispánico mientras que la situación siga siendo la que es".

Martínez Inglés añade en su escrito que "hace tiempo que me di cuenta del desatre político, orgánico, social... que vosotros representáis, y de que tu talante visionario, iluminado, de ideólogo trasnochado, esta llevando ( ha llevado ya) al ilusionante proyecto que un día fue Izquierda Unida al más deprimente fracaso".

Asimismo, señala que la Secretaría de Estudios y Programas que un día le ofreció Anguita, "nunc fue otra cosa que un florero puesto por el PCE en la vistosa sede federal de IU, para engañar al personal".

Tras otras consideraciones, Martínez Inglés le dice a Julio Anguita: "quédate pues, compañero Anguita, con tu secretaría de Estudio y Programas. Dimito irrevocablemente. Era un cargo de confianza y yo hace bastante tiempo que perdí mi confianza en ti y en tus métodos".

"No deseo seguir poniendo mi nombre, mi honestidad y mis conocimientos", concluye la carta, "en favor de una causa perdidacomo la vuestra. Sois como los demás políticos a los que despreciáis (este caso de corrupción tapada así lo demuestra) y sin embargo, os creis los ángeles custodios de una sociedad desorientada que está empezando a pasar totalmente de vuestras ofertas políticas"