Martínez Camino hizo esta afirmación tras la decisión de la Comisión de Reproducción Asistida de permitir la selección de células embrionarias para que los bebés nazcan libres de dos tipos de cáncer, uno de mama y, el otro, de tiroides.

"La técnica de selección embrionaria no cura ninguna enfermedad. Curar es quitar una enfermedad a uno que la tiene, pero esas técnicas elimina a los enfermos y deja vivir a los sanos. Eso no es curar", sentenció.

Explicó que la citadas técnicas "no son curativas, sino eugenésicas: seleccionar unos para la muerte y a otros para la vida. Esa es la realidad y lo demás es propaganda".

Martínez Camino recalcó que con la selección de células embrionarias para que nazcan bebés libres de dos tipos de cáncer "no se curará a nadie, porque ya está sano, es decir, se deja nacer a los sanos y se elimina a los enfermos. Esa es la realidad que la Iglesia tiene que denunciar".

"No se puede hacer el bien, es decir que nazca un niño y todos nos alegramos de ello, a costa de hacer el mal radical, que es matar", concluyó.