"Lo que sí les pediría, a ETA, a la Aencia Tributaria, a Herri Batasuna, al Ministerio del Interior y a todos esos que parece que están especialmente interesados en mí, es que pidan cita, que no hay problema, que no se me apelotonen, que vengan de uno en uno, que estaré encantado de recibirles", bromeó el columnista.

Martín Prieto, que habitualmente escribe artículos de opinión en el diario "El Mundo" y la revista "Interviú" y colabora en las tertulias de "Protagonistas" de Onda Cero Radio (OCR) con su personal "Picotazo", se ha caracterzado por un estilo de denuncia ácida y directa.

Esta línea le ha valido amenazas de distintas procedencias. Hace algo más de un año, algunos dirigentes de Jarrai (la rama juvenil de HB) le sentenciaron a muerte en una rueda de prensa, lo cual motivó un duro artículo de Martín Prieto al día siguiente, que el periodista tituló con la dirección de su casa, y que fue difundido en muy diversos medios de comunicación.

También se conoció recientemente que estaba, junto a otros periodistas más o menos detacados, en una lista de la Agencia Tributaria para ser "especialmente investigados" en busca de posibles irregularidades fiscales que pudieran ser utilizadas como medida de presión contra ellos.

"La profesión de periodista ha sido tradicionalmente de alto riesgo", comentó el columnista, "pero hasta ahora ese riesgo se traducía en la vida insalubre que llevamos, en la que se bebe, se fuma y se toma mucho café, tenemos horarios atrabiliarios y acabamos muriéndonos jóvenes. Ultimamente se está convirtiedo en una profesión, más que peligrosa, incómoda".

Sobre la lista de posibles objetivos de ETA descubierta por la Policía, en la que figuraban militares, guardias civiles, vigilantes de prisiones y un único periodista, Martín Prieto, el propio afectado señaló que su nombre aparecía allí "como una mosca en vaso de leche, porque no creo que vayan a ampliar ahora su radio de acción".

"El hecho de que mi nombre aparezca en esa relación, con fotos y datos personales, despierta en mí más que nada curioidad periodística", aseguró. "No tengo ningún tipo de preocupación personal, porque estoy perfectamente asistido y no creo, sinceramente, que vaya a sufrir ningún atentado".

"Por otra parte, no soy un periodista que se haya destacado especialmente en el rechazo a ETA, al menos en comparación con otros colegas", señaló Martín Prieto. "En cambio, me consta que existe una presión muy fuerte sobre los periodistas que trabajan en el País Vasco, que se sienten amenazados y seguidos".

"Hace un año sí reibí algunas amenazas telefónicas y postales, con motivo de la polémica con Jarrai", recordó el periodista, "pero no he advertido en mi entorno, ni me preocupo de comprobarlo, ningún tipo de seguimiento ni de amenaza, ni de presión".