Este foro tuvo como principal objetivo analizar las perspectivas que presenta el proyecto de Ley de Contratos del Sector Público, que se encuentra actualmente en las últimas étapas de su proceso de redacción, además de estudiar como afectará la Ley a los contratos entre empresas privadas y la administración pública en materia de defensa.

Todos los ponentes del foro coindieron en destacar que las Fuerzas Armadas se encuentran en un punto de inflexión, con unas nuevas necesidades de gestión derivadas de los procesos de transformación tecnológica y de profesionalización de los militares.

El diputado socialista y vocal de la Comisión de Defensa del Congreso, Jordi Marsal, dijo que "los nuevos escenarios crean nuevas necesidades de gestión y es necesario que los militares se centren en lo militar y que lo demás lo hagan civiles, es decir, empresas privadas".

Marsal defendió el nuevo proyecto de Ley de Contratación porque cree que con ella "se garantiza la transparencia e igualdad de oportunidades en la contratación pública de Defensa, y además la Administración Pública puede obtener mejores condiciones".

"El proceso de profesionalización no ha sido fácil, no sólo por la cantidad de efectivos, sino también por la calidad de estos efectivos, y esto junto con las nuevas necesidades de gestión debidas a la revolución tecnológica de los asuntos militares hace necesaria una nueva Ley de Contratación, ya que la anterior está obsoleta", añadió Marsal.

ESCASO PERSONAL MILITAR

El que fuera ministro de Defensa durante la primera legislatura popular, Eduardo Serra, fue el encargado de cerrar la ronda de conferencias y también defendió la externalización como solución a los retos a los que se enfrentan las Fuerzas Armadas.

Serra dijo que "debido a que tras la profesionalización el personal militar es escaso, ahora ya hay muchas cosas que no se pueden hacer con medios propios, por lo que es necesaria la externalización".

Para el ex ministro de Defensa, esta externalización redunda en la "ola de privatizaciones" que han experimentado todos los países europeos en los últimos años y que, en gran medida, se deben "a la ineficacia de los Estados comparada con la efectividad de las empresas privadas".

Pero aún así, Serra advirtió que no debe darse "un proceso de privatización de la Defensa, ya que es un bien indivisible y que pertenece a la sociedad", aunque reconoció que, con la nueva Ley, "se busca la mayor flexibilidad posible dentro de las Fuerzas Armadas".

"Vamos hacia una mayor flexibilidad de contratación, siempre que haya un uso económico eficiente de los bienes y el Estado se posicionará menos como protagonista económico y más como árbitro y rector de esta actividad", añadió Serra.

Este foro estuvo organizado por la Asociación de Empresas Contratistas con las Administraciones Públicas (AESMIDE), en la que participan el Grupo Fundosa, el Corte Inglés, el Banco Santander, el Grupo Cofares y Clece Servicios.