Este es el contenido de la moción que los socialistas defenderán en el Congreso, y que es consecuencia de la interpelación protagonizada el pasado miércoles en la sesión de control por el socialista Manuel Marín y el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy. De nuev será Marín quien defienda la moción ante el Pleno del Congreso, según informaron a Servimedia en fuentes socialistas.

Pese a las argumentaciones del Ejecutivo, los socialistas siguen pensando que Cabanillas fue el filtrador a los medios de comunicación de una falsa información procedente de la Embajada, que no fue debidamente contrastada por el Ministerio de Asuntos Exteriores.

Por este motivo, pedirán al Congreso un pronunciamiento a favor de la reprobación de ambos ministros y del cese del embjador.

Lejos de dar este asunto por zanjado, el PSOE tiene la firme intención de seguir reclamando al Gobierno la asunción de responsabilidades políticas por lo sucedido.

Varios dirigentes socialistas, entre ellos el propio secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, han expresado su convencimiento de que lo ocurrido no fue un simple malentendido, sino que obedeció a la intención de dañar la imagen del ex presidente Felipe González.

Pese a reconocer que la información pudo ser efectivaente "mal procesada", los socialistas recuerdan que el Gobierno mantuvo sus acusaciones incluso después de que el propio González desmintiera su contenido.

El propio Rodríguez Zapatero aseguró públicamente el pasado viernes que esa actitud muestra la intencionalidad de lo ocurrido y es el motivo principal por el que el Ejecutivo debe asumir responsabilidades políticas.

"Cuando se ha tenido intencionalidad, se ha escuchado que no era verdad y no se ha creído, hay que pagarlo, con la responsabilida política. Y si no, todo lo de la regeneración democrática del señor Aznar, era un cuento chino", dijo el líder socialista.