En declaracions a Servimedia, Robles Fraga dijo que la destitución del titular de Interior marroquí supone la asunción por parte del monarca de una política más abierta y de una mayor democracia.

Añadió que, por lo que respecta a España, supone que el rey marroquí está dispuesto a buscar unos interlocutores distintos y unos nuevos políticos en un tema tan importante para nuestro país como es el Sáhara Occidental, y expresó su confianza en que sirva para acelerar este proceso y poder llegar a la celebración de un reeréndum, según el mandato de Naciones Unidas.

"Yo creo que demuestra, por otra parte, que la nueva situación política requiere de más política, de más apertura también en las políticas, de menos cerrazón que en el pasado, en el sentido de que este es un régimen que trata de lanzar mensajes claros y de hacerlos más comprensibles y más transparentes", indicó.

En su opinión, se ha cerrado la etapa de Hassan II y este es el principio de un cambio, anunciado por el nuevo rey, que significa que han de ambiar los responsables que hasta ahora habían dirigido los hilos y trastiendas de la política marroquí.

"Yo creo que es una señal positiva que hay que saludar con esperanza y que debe permitirnos desarrollar todavía más las relaciones con Marruecos y contribuir entre todos al desarrollo social y económico en ese país, y por supuesto a su desarrollo político", concluyó.