El informe tiene en cuenta dos partidas: los fondos FMF (Foreign Military Financing), destinados a equipos militares y técnicos, y los IMET (Military Education and Training), destinados a entrenamiento de tropas.

Marruecos es el tercer país del mundo que más ayudas militares recibirá este año de la Administración Clinton, después de Egipto (388.000 milones de pesetas) e Israel (225.000 millones), subrayan los representantes de Amnistía Internacional.

Según AI, el Pentágono justifica la cuantiosa ayuda a Marruecos porque "aunque Estados Unidos sigue preocupado por los malos tratos a prisioneros y la falta de procesos adecuados, en los últimos meses el Gobierno marroquí ha tomado una serie de medidas positivas en materia de derechos humanos".

El documento añade que las autoridades de Estados Unidos reconocen además que "el programa IMET confront a importantes segmentos del poder marroquí con nuestros puntos de vista sobre la democracia, los derechos humanos y el papel adecuado de los militares".

El informe no se refiere en ningún momento a la responsabilidad del rey Hassan II en el régimen marroquí ni a una posible confrontación con el Frente Polisario.

Los responsables del informe de AI insisten además en que en Marruecos "continúan los arrestros arbitrarios en manifestaciones pacíficas contra el régimen, torturas sistemáticas a presosde conciencia, a menudo durante las primeras 48 horas de arresto, juicios injustos y encarcelamiento de más de 600 presos políticos".