Palacio respondió en la Cope a las reservas expresadas por Benaisa por la presencia de una fragata española en el Peñón de Alhucemas. Según la ministra, ese buque hacía "labores de aprovisionamiento totalmente regulares y habituales",y así se lo comunicó a su homólogo.

A continuación, reconoció la necesidad de reconstruir "una confianza que ahora mismo no existe", y recordó que ello pasa por una voluntad de ambas partes.

"Hay un compromiso del ministro de Asuntos Exteriores marroquí de venir en septiembre a Madrid y continuar ese diálogo. Las relaciones entre países siempre se construyen con la misma argamasa que las relaciones entre individuos", explicó.

La ministra aseguró que la postura del Gobierno español ha sido "frme" en todo momento, lo cual no es obstáculo para ver "con mucho interés" las reformas emprendidas por Mohamed VI, como ella misma expresó en su comparecencia ante el Congreso de los Diputados.

Finalmente, Ana Palacio reiteró que no hubo en la negociación sobre Perejil "ningún Plan Powell", sino que el secretario de Estado norteamericano ejerció de "testigo de excepción" de un acuerdo bilateral que debe tener su continuación a partir de septiembre.