El portavoz de Asuntos Exteriores del PSOE, Manuel Marín, aseguró a Servimedia que las circunstancias diplomáticas no tiene por qué influir en la asistencia de la familia real española al enlace y se mostró seguro de que los Reyes acudirán en persona o mandarán a alguien en su representación, como suele ser costumbre en este tipo de actos.

Por su parte, el portavoz de CiU en el Congreso, Xavier Trías, no dudó de que la monarquía española irá "seguro" a la boda del Rey de Marruecos, al igual que el Gobierno, en el caso de que fuese invitado. Según explicó, "hay que distinguir entre cuestiones personales y políticas", por l que no hay razón para no ir al evento.

José Luis Centella, de Izquierda Unida, mostró su indiferencia como republicano al hecho de que el Rey Juan Carlos o algún otro familiar asista a la boda de su homólogo marroquí y, simplemente, se limitó a reclamar al Ejecutivo que presione al Gobierno de este país para que respete los derechos de los ciudadanos saharauis.

Por último, el portavoz parlamentario de Asuntos Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui, prefirió no hacer ninguna valoración sobre el sunto y mostró sus respeto a la decisión que tome la familia real española en su momento.