El lapso de tiempo para impugnar es de un año, que vence el próximo día 26. Hasta el momento, la Junta de Accionistas de Banesto celebrada en marzo del 94 ha sido impugnada sólo por el ex vicepresidente de la entidad, Ricardo Gómez-Acebo, impugnacióndesestimada por el titular del juzgado núm. 60 de Madrid, doña Matilde Aparicio. La sentencia ha sido recurrida.

Sin embargo, el equipo jurídico de Mario Conde considera que aún hay argumentos jurídicamente válidos para proceder a una nueva impugnación que, de ser aceptada por el juez, supondría la invalidez de la ulterior subasta pública en la que el Banesto fue adjudicado al Banco Santander de Emilio Botín.

Por otra parte, y por lo que respecta al ámbito penal, el equipo Conde podría personarseen el Tribunal Supremo en la demanda de Luis Roldán contra Narcís Serra y otros altos cargos del Gobierno, en relación con el llamado Informe Crillón.

La tesis de los abogados de Conde es que las actuaciones contra Mario Conde y otros ex altos cargos de Banesto podrían resultar nulas en el caso de que se hubiesen realizado a través de la información facilitada a través de un cauce ilegal "tal cual es un informe realizado desde el Estado sobre una persona y pagado con fondos reservados".

Siempre sgún el equipo jurídico de Conde, de esta forma se uniría la vía civil de la impugnación de la Junta de Banesto de marzo del 94 con la querella criminal que llevó a Alcalá Mecó al ex presidente de Banesto y a Arturo Romaní.

En cualquier caso, de presentarse por la vía civil las precitadas impugnaciones contra al Junta de Accionistas de marzo, se encontrarán con una jurisdicción ya formada: la precitada sentencia de la jueza Aparicio, y la que, en el mismo sentido, ha fallado el juez Sagrario Arroyo Garía (Juzgado núm. 13 de Madrid), al desestimar la impugnación realizada por la asociación de Defensa del Accionista y por Reagrupamiento de Accionistas de Banesto sobre la misma junta de accionistas.