En la última reunión del órgano de gobierno del Congreso se acordó que en la siguente convocatoria el presidente comunicaría el resultado de su investigación, según informaron a Servimedia fuentes parlamentarias, con lo que Marín debe tener listo su informe para la Mesa prevista para mañana a las cinco de la tarde.

La actuación de parte de la delegación que asistió a la sesión de la Comisión de Defensa celebrada el pasado 29 de mayo, y que había sido invitada por el Grupo Socialista, llevó al PP a pedir al presidente que depurara responsabilidades y suspendiera temporalmente los derechos de los parlamentarios que cursaron esta invitación.

El principal partido de la oposición reclamó también en su día que se adoptaran medidas para reforzar la seguridad en las dependencias del Congreso, cuestión que comparte la Presidencia de la Cámara, por lo que empezó a elaborar un informe para estudiar las iniciativas a adoptar.

Tras el percance, la Presidencia hizo público un comunicado en el que subrayaba que la presencia de estas personas en los edificios del Congreso no está permitida ni por el Reglamento ni por las normas de Gobierno Interior de la Cámara.

"Los grupos parlamentarios están incurriendo en el error de invitar a colectivos afectados o interesados en un determinado debate político para ejercer presión y obtener réditos mediáticos. Esta espiral que se está reproduciendo en los últimos meses puede acarrearle serios problemas de imagen y prestigio al Parlamento", advertía Marín.

Este asunto volverá, por tanto, a la Mesa del Congreso, que en su orden del día para mañana tiene previsto aprobar el acta y las cuestiones pendientes de la anterior reunión, entre las que figura el tema de Trillo, estudiar documentos que han entrado en e registro, y resolver cuestiones administrativas.