En declaraciones a la Cpe, Robles, actual magistrada de la Audiencia Nacional, indicó que "en el año 1986, cuando llegó a lo que era la Audiencia Territorial de Barcelona un sumario en relación a Banca Catalana, en aquel entonces, junto con otros siete compañeros más, entendíamos que podía haber indicios racionales de criminalidad no para condenar, sino para procesar a Jordi Pujol".

Robles, que fue presidenta de la Audiencia Provincial de Barcelona, agregó que "en aquel momento pensábamos que es fundamental que todos los cidadanos sean iguales ante la ley y, por tanto, si hay indicios racionales se dicte procesamiento".

La ex secretaria de Estado también se refirió a la polémica suscitada por las declaraciones de Xabier Arzalluz sobre los jueces y en ese sentido indicó que los magistrados tienen que estar necesariamente integrados en la sociedad donde imparten justicia.

Tras matizar que "en ese sentido no creo que sea absolutamente necesario que sea el euskera", agregó que los jueces deben "comprender la realidad scial y dentro de una realidad social hay que aceptar que en determinadas comunidades, como ocurre en Cataluña o en Euskadi, se habla un idioma propio y es bueno que los jueces conozcan y entiendan ese idioma".

Por otra parte, Robles aseguró que no comparte las críticas que se han vertido contra el magistrado José Augusto de Vega, nombrado la pasada semana presidente de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, que deberá juzgar el 'caso GAL'.

Dijo que "hay que tener en cuenta que el presidente de unasala, aunque sea la Sala Segunda de lo Penal, es un voto más, no tiene voto de calidad y por tanto yo confío en que los magistrados que en su día juzguen el 'caso GAL', como cualquier otro caso, lo que hagan sea cumplir estrictamente la legalidad sin hacer ningún tipo de distinciones con independencia de las personas que estén sometidas a juicio".

Afirmó que a Felipe González, "como a cualquier otro ciudadano, le otorgo el pleno principio de presunción de inoncencia y no sólo eso, sino que además habl de mi experiencia personal en los tres años que pude trabajar con el Gobierno que él presidía y lo único que pude ver es siempre colaboración en la lucha contra la corrupción y la colaboración con la justicia".

"Nunca el ex presidente hizo nada o dijo nada que yo pudiera entender o que ninguno de los que estábamos en el ministerio pudiéramos entender como algún tipo de limitaciones a la justicia", añadió.

A su juicio, "es mala una justicia que se pone en funcionamiento doce años después como en l 'caso GAL'. No es justicia, ni es ágil ni es eficaz y por eso es absolutamente necesario que todos colaboren con la justicia".

Robles aseguró que "esta sociedad no podrá mirar tranquilamente al futuro si crímenes tan espantosos como los de los GAL no se aclaran".

Finalmente, destacó que durante su etapa en el Ministerio de Justicia e Interior, nunca se enfrentó con Belloch, aunque reconoció que pudo haber discrepancias, "pero lo spuntos generales de la lucha contra la corrupción eran unos punto que compartíamos, no sólo Belloch y yo, sino el propio programa con el que el PSOE se había presentado a las elecciones del 93 en el que se hablaba del cambio del cambio y la lucha contra la corrupción".