Oreja reconoció, en declaraciones a Radio Nacional, que en España hayactualmente un buen número de 'euroescépticos' y señaló que hay que hacer frente a eso, porque, aseguró, "no hay ninguna institución que pudiera resolver mejor los problemas que la UE en el marco que le corresponde".

Explicó que "como los problemas no se resuelven en el interior de los estados hay una tentación de echar la culpa a Europa de las cosas que no funcionan bien y eso lo estamos viendo en todos los países, incluyendo España".

Argumentó que "lo que no es posible es creer que todos los prblemas se van a resolver al nivel de la UE. Hay muchos problemas que tienen que resolverse a nivel nacional y sólamente en el caso de la insuficiencia por parte de los estados es cuando hay que apelar a la UE", dijo.

El comisario europeo puso como ejemplo el tema de la seguridad para razonar este escepticismo ante la UE, reinante en varios países europeos, no sólo en España. A su juicio, "el ciudadano no entiende que haya una ausencia de la UE en la resolución de los grandes problemas que afectan en ete momento a Europa desde el punto de vista de la seguridad, como se ha demostrado en el conflicto de Yugoslavia".

"El ciudadano, mientras vea que hay problemas que afectan a su economía y que no se resuelven suficientemente, que hay otros a la política exterior y que sin embargo la política europea no es suficientemente eficaz ,evidentemente habrá una desconfianza", añadió. También echó en falta una carencia de liderazgo político en los países europeos y "todo esto influye en la desconfianza que hay on respecto a la UE".

Oreja desestimó la idea de que haya que conducir a la UE hacia unos Estados Unidos de Europa. Defendió la individualidad de cada país miembro y limitó la unión a los campos económico, monetario y de circulación.