Este especialista afirmó que la neuromodulación consiste en el empleo de un marcapasos, similar al utilizado en las arritmias de corazón, que emite impulsos eléctricos con el fin de regular los reflejos que controlan la mición y que se encuentran alterados en la disfunción crónica.

La técnica está indicada en casos de incontinencia de urgencia por hiperactividad de la vejiga en los que el tratamiento farmarcológico o de rehabilitación han fracasado. También se están utilizando las cintas de libre extensión en la cirugía de la incontinencia, que ha simplificado esta intervención, que resuleve entre el 85 y el 90% de los casos.

El doctor Castro señala que más del 8% de las mujeres con edades comprendidas entre los 35y los 50 años han sufrido algún episodio de incontinencia urinaria. A partir de los 55, el problema afecta a un 12% y desde los 65 años el riesgo se iguala entre hombres y mujeres.

La incontinencia que afecta a mujeres durante la menopausia está relacionada con los partos. El traumatismo que se produce en la zona pelviana es el responsable de que posteriormente se manifieste una incontinencia urinaria de esfuerzo (pérdida involuntaria de orina que aparece cuando hay un incremento en la presión abdominl al toser, al coger peso o al caminar rápido).

Los problemas localizados en el suelo pélvico de la mujer afectan a la zona anterior (vejiga y uretra), la media (vagina y útero) o la posterior (recto). Depende del lugar dañado, sería necesario la intervención del urólogo, el ginecólogo o el cirujano general.

Una de las primeras medidas terapéuticas que se indican a estas mujeres es la rehabilitación perineal, unos ejercicios para fortalecer el periné.