En una entrevista que hoy publica el diario La Vanguardia, Maragall afirma que en los últimos dos años no se ha cambiado de gobierno, sino de "sistema de gobierno", ya que "éste no es un gobierno nacionalista, como el anterior".

"Este gobierno quiere gobernar las realidades del país de una manera más efectiva, menos ideológica, y hacerlo en conexión con la España plural", añade.

ESTATUTO CATALAN

Con respecto al Estatuto catalán, Maragall reconoce que "en los términos planteados resultaría inaceptable", si bien "no podemos olvidar que estamos en plena negociación".

"Barcelona y Catalunya aspiran a adquirir una relevancia política que quizá no habíamos tenido nunca, y con ello estamos desafiando el dualismo español", explica.

Además, para Maragall "la apuesta ganadora es la de ir conduciendo el independentismo hacia el federalismo".

En su opinión, el "Estatut" no va en contra de la Constitución, sino que restablece "la dualidad constitucional inicial" de la Carta Magna, que reconocía tres nacionalidades históricas: catalana, vasca y gallega.

En este sentido, el dirigente del PSC afirma no querer "negarles nada a las demás", si bien "se ha desleído la función que tenía la palabra nacionalidad en la Constitución", al permitir que otras comunidades la vayan a incluir en sus estatutos.

BOICOT Y MERCADO

En cuanto al llamado "boicot" a los productos catalanes, Maragall resta importancia a la cuestión al afirmar que "los boicots son movimientos espasmódicos y de corto vuelo".

El político catalán reconoce la necesidad de una unidad de mercado, si bien "no estamos hablando de la unidad de mercado de España", sino "del mercado europeo".

Por último, el presidente de la Generalitat recalca que, a pesar de los que diga el líder de CiU, Artur Mas, "este Govern no es partidario de un incremento del sector público".