Rodríguez Zapatero llegó al Senado cuando el debate ya estaba comenzado, ya que había estado en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados.

Se dirigió directamente a las dependencias del Gobierno y hacia las seis de la tarde entraba en ellas el presidente de la Generalitat, con semblante serio y sin querer hacer comentario alguno a los medios de comunicación.

Dirigentes de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) han reconocido que temen un cese inminente de sus consejeros ante la decisión de pedir el "no" en el referendum del Estatuto, una posición que desde amplios sectores socialistas se considera incompatible con su permanencia en el tripartito.

Ante la pregunta de si puede haber ceses inmediatos en el Gobierno de la Generalitat, Maragall se limitó a encoger los hombros en un claro gesto para indicar su negativa a desvelar la incógnita.

Las dependencias del Gobierno en el Senado fueron un continuo goteo de dirigentes socialistas que entraban y salían, entre ellos el ministro y primer secretario del PSC, José Montilla, y la dirigente Carme Chacón.

Al salir de la reunión con Rodríguez Zapatero, Maragall se limitó a decir a los periodistas que el presidente del Gobierno y él son "amigos desde hace mucho" y en la reunión de hoy hablaron "de todo y de nada".