MARAGALL CALIFICA DE "LAMENTABLE" LO SUCEDIDO A BONO PORQUE "QUITA EFICACIA EN EL TRATO CON EL MUNDO DEL TERROR
- Defiende una relación "más civil" entre Iglesia y Estado
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pascual Maragall, afirmó hoy, en relación con los incidentes durante la manifestación contra el terrorismo del pasado sábado y las agresiones contra José Bono, que "las fotos que he visto son desagradables y es lamentable porque esto nos quita una cierta eficacia en el trato con lo que es el mundo del terror".
Maragall hizo estas consideraciones en la sede del Gobierno de la Comunidad de Madrid, durante un encuentro organizado por el Foro Nueva Economía donde habló de la reforma del Estatuto catalán.
"Es mejor ir unidos siempre", aseveró el presidente catalán respecto a la necesidad de la unidad en la lucha contra el terrorismo.
Maragall, que fue presentado en el acto por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, afirmó, sobre otros temas, que "Cataluña no tiene la llave de nada que tenga que ver con el proceso vasco".
Destacó que no ha hecho ningún ofrecimiento de mediación con el "lehendakari", Juan José Ibarretxe, sino que "fue una declaración de disponibilidad para hacer lo que fuese para que el drama que se está viviendo en el País Vasco deje de existir".
"No habrá ninguna mediación catalana en el tema vasco perotampoco vamos a mostrar poco interés", aclaró.
También se refirió a las relaciones Iglesia-Estado en la actualidad y, tras precisar que "todo tarda un tiempo en madurar", explicó que durante los últimos 25 años ha habido "un gran consenso y cautela" a la hora de abordar estas cuestiones.
Maragall añadió que 25 años después "me parece excelente que, finalmente, con un gobierno progresista se empiece a plantear lo que sería una relación mas civilizada, más civil".
CONSIDERACION DE ESTADO
El presidente de la Generalitat afirmó que "queremos un Estatuto que reafirme nuestra voluntad de ser considerados como Estado y que renueve el pacto de solidaridad y amistad de Cataluña con todos los pueblos de España".
Explicó que la llamada "vía catalana" que ha emprendido su gobierno para abordar la reforma estatutaria "no será el proyecto de una persona", por lo que "no va a existir un 'plan Maragall', y que para ser aprobada ha de contar con el apoyo como mínimo de dos tercios del Parlament".
Defendió "el máximo consenso" para aprobarlo y dijo que "otra preocupación preside la reforma: la de asegurar su plena constitucionalidad".
"Estoy firmemente convencido de que una propuesta de reforma del Estatuto de Cataluña en el marco de la Constitución española y con un apoyo parlamentario tan amplio no puede sino tener una acogida positiva y favorable en la Cortes Generales", manifestó.
"Nuestra propuesta es un reto para todos, pero no es un órdago", destacó.
PAISES FEDERALES
Con respecto a su modelo territorial de España, dijo que "reclamo para Cataluña una España basada en la aceptación de la diversidad y no en la desigualdad ni en los privilegios. Mi modelo es el de los países federales, en los que precisamente se alcanza una perfecta compatibilidad, un equilibrio básico,entre igualdad y diversidad".
También abordó la financiación de las comunidades y señaló que es necesaria una "revisión a fondo del sistema que fije un cuadro estable de relaciones fiscales y financieras de carácter federal, equitativo y duradero con corresponsabilidad y suficiencia".
(SERVIMEDIA)
26 Ene 2005
O