MANTENER LA MORATORIA NUCLEAR LE COSTARA 67.000 MILLONES AL AÑO A LOS CONSUMIDORES

MADRID
SERVIMEDIA

El mantenimieto de la moratoria nuclear en el nuevo Plan Energético Nacional (PEN) hasta el año 2000, que previsiblemente estudiará mañana el Consejo de Ministros, le costará a los consumidores, como mínimo, unos 67.000 millones de pesetas al año, que deberán pagar en el recibo de la luz, según informaron a Servimedia fuentes empresariales del sector eléctrico.

Esta es la cantidad que resulta de aplicar el 3,54 por ciento que figura en la tarifa como cuota para indemnizar a las compañías eléctricas con centrales bjo moratoria. La estimación se ha realizado extrapolando el consumo de electricidad en el primer semestre de 1991 a todo el año y tomandolo como referencia de "mínimos" para ejercicios venideros.

Presumiblemente, el coste final de la moratoria para el consumidor será algo mayor al que resulta de estas estimaciones, si se tiene en cuenta que las tarifas de la luz suelen subir algo por encima del IPC y que el consumo crece varios puntos porcentuales cada año.

La decisión del Gobierno de mantener lamoratoria nuclear y de hacer recaer su financiación sobre los consumidores ha sido criticada por las organizaciones de consumidores y por los sindicatos.

A este respecto, la Federación de Energía de CCOO se ha mostrado a favor de la moratoria hasta que termine el ciclo de actividad de las centrales en funcionamiento, por entender que el cierre nuclear no es asumible financieramente. Sin embargo, ha criticado que se haga recaer el coste de la moratoria sobre el consumidor.

Hasta 1990, las compañía eléctricas con centrales nucleares paralizadas desde que se decretó la moratoria en 1984 han percibido un total 290.250 millones de pesetas, a través de la tarifa de la luz que pagan los consumidores.

Esta cifra no ha logrado compensar las inversiones reconocidas por el propio Ministerio de Industria a las empresas propietarias de esas centrales nucleares, cuyo montante asciende a 625.296 millones de pesetas, a pesar de que el 3,54 por cien de la tarifa que se llevan actualmente las empresas por estemotivo ha sido revisado en dos ocasiones.

Las inversiones reconocidas por el Gobierno se distribuyen entre los 335.761 millones de pesetas estimados para los dos grupos de Lemoniz, propiedad de Iberduero, los 278.759 millones para Valdecaballeros I y II, financiados al 50 por ciento por Hidrola y Sevillana de Electricidad, y los 10.296 millones de Trillo II, repartidos entre Endesa (80 por cien) y Fenosa (20 por cien).

Estas cantidades han dado lugar a un reparto de amortizaciones anual que fue d 24.000 millones de pesetas en 1984, 40.000 millones en 1985, 40.500 millones en 1986, 41.000 millones en el 87, 45.850 millones en el 88, 47.900 millones en el 89 y 51.000 millones en 1990.

Del conjunto de estas amortizaciones, 179.967,8 millones de pesetas correspondieron a la central nuclear de Lemóniz, mientras que los propietarios de Valdecaballeros percibieron 129.161,2 millones de pesetas y los Trillo II, 4.644 millones de pesetas.

Además, las amortizaciones percibidas anualmente por las eéctricas a través de la tarifa de la luz en los últimos seis años, no se corresponden con lo que, a su juicio, deberían haber cobrado, ya que defienden una valoración de sus activos bajo moratoria superior a la que hace el Gobierno.

DIFERENTE VALORACION

Frente a la cifra que reconoce el ministerio, las compañías aseguran que sus inversiones superan los 850.000 millones de pesetas, lo que implicaría una amortización mediante el recibo de la luz aún mayor que la percibida desde 1984.

En el caso d Lemóniz, Iberduero es la que más se ajusta a las estimaciones del Gobierno, y cifra los activos de la central vizcaina en cerca de 350.000 millones de pesetas, a los que habría que sumar los casi 500.000 millones que Sevilla e Hidrola dicen haber invertido en Valdecaballeros.

La diferencia entre las estimaciones oficiales y las de los propietarios de las centrales es la que tendrán que "limarse" en las negociaciones que, necesariamente, mantendrán los representantes de las empresas afectadas y del Miisterio de Industria, para fijar la amortización que deberán percibir las compañías eléctricas.

Las fuentes empresariales consultadas por Servimedia señalaron que, en esa negociación, habría que buscar una instancia neutral que dictara un arbitraje para establecer el valor real de los activos nucleares afectados por la moratoria.

A su vez, las empresas consideran que esa valoración debe incluir no sólo las inversiones realizadas antes de decretarse el "parón nuclear", sino también los ingresos qu han dejado de obtener como consecuencia de la medida.

(SERVIMEDIA)
25 Jul 1991
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