La marcha, que discurrió entre la plaza de San Agustín y la plaza del Parterre, atravesando el centro urbano de Valencia, estuvo encabezada por el presidente de la Generalitat Valenciana, Eduardo Zaplana; el ministro de Administraciones Públicas, Joan Lerma; la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y el secretario de Organización del PSOE, Cipià Ciscar, además de todos los consejeros del Gobierno Valenciano y representantes de los partidos políticos y sindicatos regionales.

La manifestación partió aproximadamente a las 7,30 de la tarde de la Plaza de San Agustín y en su marcha pasó ante el centro comercial El Corte Inglés, donde el pasado 16 de diciembre fue asesinada por ETA Josefa Corresa, mientras que otras siete personas fueron heridas al estallar un artefacto en los servicios del establecimiento.

Al final de la manifestación, al ie de la de la estatua ecuestre de Jaime I, un portavoz de los convocantes de la concentración leyó un comunicado en el que hizo un llamamiento a los valencianos para "defender la libertad, la democracia y la tolerancia, para poder vivir juntos en una convivencia pacífica".

Los asistentes a la concentración silenciosa, que se desarrolló de manera ordenada y sin ningún incidente a lo largo del kilómetro y medio del recorrido, rompieron a aplaudir al finalizar la lectura del manifiesto y tardaron variosminutos en disolverse.

El presidente de la Generalitat Valenciana, Eduardo Zaplana, dijo al finalizar la concentración que se ha tratado de "una manifestación para demostrar el desprecio profundo que nos producen esos atentados y los asesinos que los cometen".