MAÑANA SE JUZGARA A LOS ACUSADOS DE PREPARAR LA FUGA EN HELICOPTERO DE CUATRO ETARRAS DE HERRERA DE LA MANCHA

MADRID
SERVIMEDIA

Mañana, martes, se celebrará en la Audiencia Nacional el juicio contra José Luis Muñoz Rodríguez, Mikel Beloqui Iribar e Iñake Cortadi Alustiza, acusados d preparar durante dos años la huída en helicóptero de cuatro miembros de la banda terrorista ETA encarcelados en la prisión de Herrera de la Mancha (Ciudad Real).

El fiscal pide para ellos penas que suman 20 años de cárcel por un delito de colaboración con banda armada.

Según el ministerio público, José Luis Muñoz se entrevistó en el citado centro penitenciario con Ignacio de Juana Chaos, que le pidió que se informara sobre la posibilidad de alquilar un helicóptero y aprender a pilotarlo para fugrse junto con otros tres etarras presos.

Muñoz se puso en contacto meses más tarde con Mikel Beloqui, que salió de Herrera de la Mancha en mayo del 88 tras cumplir una pena de 6 años de prisión por colaboración con la banda, por lo que conocía el lugar donde debía aterrizar el helicóptero para recoger a los fugados.

El escrito del fiscal recoge que José Luis Muñoz viajó a Francia para entrevistarse con el dirigente de ETA Francisco Múgica Garmendia, "Artapalo", que le entregó dos millones de peseas para llevar a cabo el plan, que consistía en volar hasta el río Guadiana y continuar en una embarcación hasta Portugal.

El procesado regresó entonces a San Sebastián donde adquirió una lancha "Zodiac" que guardó en un garaje alquilado por Iñake Cortadi, "conociendo el destino que iban a darle y el plan de fuga de los acusados".

El fiscal sostiene que durante el verano de 1988 Mikel Beloqui realizó dos viajes por los embalses de Badajoz acompañado por Cortadi para estudiar el punto donde debía terrizar el helicóptero. Decidieron que el lugar idóneo era el embalse de Orellana.

En el mes de octubre, ante la dificultad para alquilar piso y encontrar ayuda en Portugal, los acusados concertaron con Ignacio de Juana construir un habitáculo en el límite entre las provincias de Toledo y Cáceres para ocultarse durante un par de meses y continuar después en coche hasta la frontera portuguesa.

De nuevo, José Luis Muñoz se desplazó hasta Francia para exponer a "Artapalo" la situación. El dirigenteetarra entregó 800.000 pesetas para adquirir el material necesario destinado a edificar el habitáculo, que compró Beloqui.

En abril de 1989, Muñoz y Beloqui construyeron un agujero, que aislaron mediante tablas de madera para hacerlo habitable, en un bosque situado a 200 metros de la carretera que une Puerto de San Vicente y Puente del Rey (Cáceres).

El 28 de febrero de 1990 los procesados fueron detenidos y la policía encontró en poder de José Luis Muñoz facturas por la adquisición de la embarcaión, del aéro club de Barcelona-Sabadell y una tarjeta de alumno piloto a su nombre, válida hasta abril de 1990.

El fiscal pide por esos hechos una pena de ocho años de prisión mayor para Muñoz y Cortadi, mientras que para Beloqui la solicitud asciende a 12 años por concurrir la agravante de reincidencia.

(SERVIMEDIA)
21 Oct 1991
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