La Constitución de 1978 establece en el artículo 115 que el presidente del Gobierno "previa deliberación del Consejo de Ministros, y bajo su exclusiva responsabilidad, podrá proponer la disolución del Congreso, del Senado o de las Cortes Generales, que será decretada por el Rey".

Zapatero ha convocado una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros a las 12.15 de mañana, en la que informará de la fecha elegida para la celebración de los comicios.

Además, el decreto incluirá también la fecha exacta en la que deberán reunirse los diputados electos para constituir el Congreso, en virtud de la obligación contenida en el Reglamento de la Cámara.

Nada más terminar la reunión del Consejo de Ministros, Zapatero se marchará a La Zarzuela para que el Rey dé el visto bueno a la propuesta de disolución de Cortes y convocatoria de elecciones generales.

Posteriormente regresará al Palacio de La Moncloa, donde comparecerá para hacer pública la convocatoria de la cita con las urnas y leer una declaración institucional, según confirmaron a Servimedia fuentes gubernamentales.

El decreto de convocatoria de elecciones quedará formalizado con su publicación al día siguiente en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que implica la automática disolución de las Cortes Generales y el comienzo de los plazos para la celebración de elecciones.