Este acto público, que se celebrará en Barcelona, Madrid, Valencia, Vitoria, Zaragoza, Gerona, Palma de Mallorca, Alicante, Elche, Murcia, Guadalajara, León y Santander, contará en Madrid con la presencia del Defensor del Pueblo, Fernando Alvarez de Miranda, que leerá un manifiesto.

La movilización popular, que quiere tener al miso tiempo un carácter reivindicativo y festivo, pone fin a la campaña iniciada por Intermón en octubre de 1994 y que aspiraba a conseguir la sensibilización de toda la sociedad española frente a un problema que crece día a día en los países del sur.

En Madrid, la concentración popular tendrá lugar en el Templo de Debod, donde se reunirán aquellas personas que quieran participar con su aportación (500 pesetas a cambio de las cuales recibirán un "pin" y una pegatina de color verde) en la construcción de os murales gigantes, con el lema del día.

Estas aportaciones, según fuentes de Intermón, "servirán para realizar nuevos proyectos de cooperación de Intermón en Ruanda, Guatemala y Mozambique, los tres países en los que se ha centrado la campaña sobre refugiados, porque ejemplifican perfectamente los tres tipos de intervención sobre el terreno que lleva a cabo Intermón: ayuda de emergencias, retorno y rehabilitación, y cooperación al desarrollo autóctono".

El acto contará con actuaciones muicales e grupos africanos y latinoamericanos, así como diferentes juegos solidarios dirigidos a los más pequeños.

Intermón pretende con este acto hacer una llamada de atención sobre la situación que viven más de 100 millones de personas en todo el mundo, que se han visto obligadas a abandonar sus hogares a causa de conflictos armados y guerras, persecuciones políticas, raciales o religiosas, pobreza y hambre y destrucción del medio ambiente.

La convocatoria de Intermón no es sólo un esfuerzo por difundi la grave situación de estas gentes (mujeres y niños en su inmensa mayoría), sino que pretende llamar a la participación activa de los ciudadanos españoles.