Esta dolencia, que afecta a unos 300.000 españoles, responde mejor al tratamiento en las primeras semanas de aparición, según el doctor Javier Ballina, adjunto al Servicio de Reumatología del Hospital Universitario Central de Asturias. No obstante, a pesar de la importancia de la detección precoz, la media de retraso en el diagnóstico de la artritis reumatoide es de 18 meses.

Según el presidente de Conartritis, Antonio Torralba, la artritis afecta a tres mujeres por cada varón y comienza con mayor frecuencia entre los 40 y los 60 años.