Además, dispone de 5 vehículos "egipcios", llamados así por su color arena, que serán transformados para adaptar sus antiguos usos militares a fines diferentes, como la extinción de incendios.

Jorge Murtra, director general de Protección Civil de la CAM, explicó a Servimedia que el Ministerio delInterior ha prometido enviarles lo antes posible otros 10 "egipcios" para la lucha contra los incendios.

Este nuevo cuerpo de voluntarios está formado por "personas agrupadas por su inclinación vocacional para el desarrollo de acciones de carácter benéfico social, que desarrollarán acciones de protección y salvamento de personas y bienes afectados por cualquier tipo de siniestro o calamidad pública, así como la prevención de estos hechos", según el reglamento.

Los nuevos bomberos voluntarios acturán en todo el territorio de la CAM, excepto en el término municipal de la capital, bajo la dependencia de bomberos profesionales

Los madrileños que quieran apuntarse deberán ser mayores de edad y no soprepasar los 45 años, no padecer ninguna enfermedad y residir dentro del municipio donde se halle el parque de Bomberos al que quedarán adscritos.

Quienes consideren que cumplen los requisitos exigidos, deberán dirigir la solicitud al alcalde del municipio donde quieren colaborar, indicando si desen ser bomberos simplemente o bomberos-conductores. El Ayuntamiento enviará la propuesta a la Dirección General de Protección Ciudadana de la CAM.

Por su parte, el Gobierno regional practicará a todos los solicitantes los siguientes controles: test psicológico, reconocimiento médico, control físico y escrito (saber leer, escribir, las cuatro reglas aritméticas y conocer la región).

Los ciudadanos que pasen todas las pruebas recibirán un carné provisional de bombero voluntario y, tras seguir un curo de formación de 12 meses, la acreditación definitiva.

El reglamento especifica también las causas de baja en este cuerpo voluntario: a petición propia, por enfermedad que imposibilite sus actividades y por cumplir los 60 años.

La CAM no abonará en ningún caso sueldo alguno a los voluntarios, ya que el cuerpo tiene carácter altruista y desinteresado. "Todos los bomberos firmarán, antes de recibir su acreditación, un documento de reconocimiento explícito acerca de la naturaleza voluntaria de su aeptación", señala el reglamento.

No obstante, todos los bomberos voluntarios estarán asegurados contra accidentes que puedan sufrir durante su trabajo y tendrán derecho a indemnizaciones por muerte e invalidez temporal o permanente.

Además de estar asegurados, los voluntarios recibirán ayudas económicas por gastos de desplazamiento y manutención o por deterioro de su ropa personal o bienes particulartes durante las funciones de atención a un accidente.

"El reglamento pretende ser un instrumeto que contribuya a la movilización de la conciencia ciudadana y de solidaridad social, desde la concepción de que exista en la sociedad una decidida voluntad de participación y colaboración", según sus redactores.