De las 95 "sentencias benévolas", 45 han sido minimizadas, 42 rebajadas y 8 absolutorias, por todo tipo de delitos. En concreto, 52 d ellas se refieren a penas de dos años o menos, por lo que los maltratadores no pisarán siquiera la cárcel.

Este hecho ha llevado a la Federación de Mujeres Progresistas a estudiar fórmulas que lleven a la posible recusación de los jueces, "que de una manera reiterada dictan sentencias benévolas contra los maltratadores, coadyuvando de esta manera a la perpetuación de la violencia de género en nuestra sociedad", denuncia.

"EXCUSAS"

El informe señala las "excusas" en modo de atenuantes o eximents a las que apelan los jueces y que, según esta organización, "siguen siendo absurdas y utilizadas con una ligereza que para nada tiene en cuenta la peligrosidad del maltratador, el horror y la integridad física de la víctima, ni por supuesto la disuasión de futuras violencias".

Entre ellas el informe recoge cuestiones como el estar deprimido, haber bebido, tener impulsos incontrolables, haberse entregado, reconocer los hechos, carecer de cultura o no tener trabajo, "excusas que sirven para rebajar lapena en al menos dos años a cualquier maltratador, ya esté acusado de violación, maltrato habitual o asesinato".

Las armas preferidas por los maltratadores siguen siendo sus propias manos, seguidas por las armas blancas, la violencia verbal, los objetos contundentes, el fuego y las armas de fuego.

Asimismo, los lugares donde se cometieron los hechos juzgados son mayoritariamente el hogar común, así como el domicilio de la víctima cuando se ha ido o el domicilio del propio agresor. Pero también matratan en la calle, descampados, bares, coches, trabajos, tiendas, consultas o colegios.

MUJERES Y "EX"

En cuanto al parentesco, el dominante es que sean víctimas esposas, parejas, compañeras sentimentales, novias o sus correspondientes "ex". Le siguen en orden de importancia los maltratos a hijas. En el entorno familiar se constata también maltrato a madres, hermanas, sobrinas y cuñadas. Fuera de él a amigas, compañeras, conocidas, vecinas, clientas, pacientes y alumnas. Por último hay 12 sentencia de agresiones a desconocidas y 2 a prostitutas.

Como en años anteriores, Cataluña es la Comunidad Autónoma de las que más sentencias benévolas hemos recogido, no obstante la Fiscalía de Cataluña (TSJC), en su último informe destaca que los jueces de instrucción tratan los casos de violencia familiar como una "mera operación matemática, lo que provoca que el peso del proceso recaiga sobre las víctimas, a las que no se informa si los delincuentes salen de permiso o liberados. A Cataluña le siguen Andalcía, Cantabria, Navarra, Madrid y Comunidad Valenciana.