En declaraciones a Servimedia, el portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), José Manuel Suárez, subrayó la eficacia con la que está siendo tramitada la orden de proteción, que permite poner en marcha en una plazo máximo de 72 horas todas las medidas penales y civiles al alcance de la víctima.

Sobre la incidencia que tendrá esta iniciativa como medida disuasoria y de prevención de los malos tratos, Suárez mostró su confianza en que sirva para poner freno a la violencia doméstica, si bien reconoció que aún es pronto para hacer una valoración en este sentido.

Lo que sí dejó claro es que la orden de protección es una de las medidas que demandaba la sociedad y que u puesta en marcha "está siendo eficaz".

Más escéptico se mostró Joaquín González Casso, portavoz de la Asociación Francisco de Vitoria, sobre el hecho de que la orden de protección vaya a ser el mecanismo que solucione todos los problemas de la violencia doméstica.

"Si sirve o no de cara a la prevención, eso nos lo dirá el tiempo", aseveró a Servimedia. No obstante, reconoció que el número de solicitudes está siendo importante y que el porcentaje de órdenes adoptadas es muy alto.

La importacia de esta esta orden de protección, explicó, está en que el juez adopta las medidas en un plazo de 72 horas y que son adoptadas por el juez de guardia. "Esa es la ventaja respecto a la legislación que ya existía. En ese sentido", concluyó, "bienvenida sea siempre que pueda servir para algo".

Por último, el portavoz de Jueces para la Democracia, Miguel Carmona, recordó que, a pesar del buen funcionamiento que está teniendo esta medida, la orden de protección "no es el único instrumento" para erradica la violencia doméstica.

"La solución no está sólo en la justicia penal", advirtió a esta agencia. "Es necesario que haya un funcionamiento integrado y coordinado entre jueces, policías, servicios sociales, instancias educativas y sanitarias". "Tenemos todos la obligación de funcionar de manera eficaz porque es un problema suficientemente serio", concluyó.