Malo de Molina, que participó en un seminario organizado por la casa de Bolsa FG, precisó que la demanda interna ha tomado ya el relevo del sector exterior, siendo la que aporta la totalidad del crecimiento.

Malo de Molina repasó los desequilibrios estructurales de la economía española, precisando que la situaión del déficit por cuenta corriente no es preocupante y que se encuentra bajo control.

Sí es preocupante, sin embargo, a juicio del Banco de España, el nivel de la inflación, a pesar de que los salarios están desacelerando. En este sentido, recordó que el Banco de España ha reaccionado ya en lo que va de año dos veces elevando los tipos de interés para controlar el alza de los precios.

Sin embargo, señaló que la política monetaria por sí sola no basta para controlar los precios, aunque sí se utiizará para prevenir los efectos inflacionistas que puedan tener las turbulencias cambiarias que puedan originarse.

El representante del Banco de España señaló que aún es pronto para valorar la evolución del déficit público en 1995, pero sí aclaró que los presupuesto de 1996 deberán ir acompañados de reformas legales para su cumplimiento, si bien se negó a concretar dichas reformas.