Durante su conferencia calificó la crisis económica como "una crisis coyuntural" mostrándose poco partidario de pensar que tanto las empresas como las familias se encuentren en un momento de sobreendeudamiento, y apuntó una serie de fórmulas para su superación como es el aumento de la competitividad empresarial y la moderación salarial.

Según Malo de Molina, una expansión de las exportaciones,un restablecimiento de la competitividad y una reducción de los costes de producción interior, acompañados por una moderación sustancial de los salarios, conseguirá paliar la crisis y entrar en una nueva etapa más sólida y sostenible, tal y como ya señaló el propio Gobernador del Banco.

El Director de Estudios del Banco de España piensa que "la reactivación de la economía requiere un cambio muy profundo en la estructura de la demanda, vigente en los últimos años". Asimismo, estima que "la demanda extena debe adquirir prelación sobre la demanda interna, y dentro de ésta, la demanda de inversión debe mantener el protagonismo frente a la demanda de consumo".

Por su parte, el Consejero de Hacienda del Gobierno Vasco, Jon Larrinaga, que clausuró la conferencia, acusó al Gobierno Central de utilizar medidas excesivamente puntuales, mientras que para Euskadi exigió una política económica general "que se asiente menos sobre la política monetaria, menos sobre los tipos de interés, más sobre la política fisal y, sobre todo, más sobre la política de rentas".