El príncipe Alexis de Anjou, de nacionalidad española desde 1987, aceptó el martes pasado el trono de Serbia en una ceremonia celebrada en el Parador Nacional de Monte Perdido, en el Pirineo aragonés.

La corona le fue ofrecida al aristócrata por una delegación integrada por los representantes de los grupos más extremistas de Serbia entre los que destaca el presidente del Partido Radical Serbio, Vojislav Seselj.

La estancia de Alexis de Anjou en la provincia oscense, invitado por un socio de Canal Blanco (televisión local de Jaca), Javier López Martínez, ha estado marcada por la polémica. La deuda contraída por López Martínez en diversos establecimientos hoteleros de la comarca de Jaca podría superar los dos millones de pesetas durante los más de diez días que este supuesto príncipe ha permanecido en la provincia oscense.

Lpez Martínez utilizó el nombre de Canal Blanco para extender los talones, sin garantía, de los gastos ocasionados por la visita. Este hecho aumenta las dudas sobre las pretensiones del príncipe, que ya fue condenado en 1971 a 18 meses de prisión por un tribunal de Bruselas por uso de nombres y títulos falsos.

Como anticipo de la visita, el representante del "pretendiente a seis coronas de Europa Oriental" urgió al alcalde de Zaragoza y al presidente de la Diputación a que salieran a recibirle al aeroperto, o cuando menos fijaran una hora de audiencia. Uno y otro rehusaron.

López Martínez logró hacerse recientemente con los derechos de imagen de Alexis de Anjou, tras pagar ocho millones de pesetas. Al parecer, la intención de López Martínez era cubrir la deuda de diecisiete millones que en la actualidad tiene Canal Blanco.