"Una Mafia que no estuviera amenazada no actuaría de esa manera", aseguró refiriéndose a los últimos asesinatos de los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino.

Ciarrapico aseguró que el Estado italiano está más firme que nunca en la lucha contra la "Cosa Nostra".

"Todo el pueblo italiano está firme, el Gobierno está muy firme, no creo que tngamos que ser pesimistas para el futuro", señaló.

"No sólo hay que actuar con firmeza, con inteligencia, con gran determinación, sino que hay que evitar las emociones, que no sirven de nada en este caso", recalcó.

Ciarrapico afirmó que "se están preparando instrumentos jurídicos que permitan luchar contra la Mafia de una manera mucho más eficaz, mucho más firme".

"No creo que sea una lucha que va a terminar rápidamente, porque requiere un cierto tiempo, pero no creo que la Mafia tenga ningua posibilidad de sobrevivir; no digo que vaya a ser completamente eliminada, pero va a ser reducida a una cosa insignificante", aseguró.

El embajador apuntó que el Senado italiano debatirá hoy mismo una Ley Anti Mafia, después de haber sido adelantada por unos días. Esta medida "permitirá una completa coordinación entre las distintas fuerzas de Policía, la lucha puede ser mucho más eficaz", señaló.

"Actualmente no hay más descuento" a la cadena perpetua, según Ciarrapico. "Las formas de amnistía on muy raras, muy limitadas, nunca en el caso de delitos mafiosos", añadió.

El problema para las fuerzas de seguridad es "encontrar las pruebas" con que condenar a los mafiosos. "Pero le puedo asegurar que todo lo que es el panorama mafioso es muy bien conocido por la Policía italiana, esta misma actividad tan violenta muestra que están a la defensiva", dijo Ciarrapico en las mismas declaraciones a la cadena Onda Cero Radio.

El embajador aseguró que matando a dos jueces, la Mafia no conseguirá naa, salvo gran dolor, e insistió en que todos los magistrados que se ocupan de la Mafia están muy preparados. "Varios jueces jóvenes pidieron ellos mismos ir a Sicilia a ocuparse de la Mafia", aseguró.