A juicio del diputado popular Jesús Pedroche, teniendo en cuenta un consumo medio que oscile entre los 100 y 300 metros cúbicos trimestrales, el agua que consumen los madrileños les resulta entre un 12 y un 14 por ciento más cara que la que toman los barceloneses.

La diferencia se incrementa si la coparación se realiza con Sevilla, donde el agua es un 62 por ciento más barata, o en Huesca, un 77 por ciento menos cara.

De acuerdo con los datos aportados por el PP, un madrileño que haya consumido 320 metros cúbicos de agua en 1992 habrá pagado 32.370 pesetas, cifra que en Huesca se reduciría a 20.470 pesetas, en Sevilla a 20.089 y en Barcelona a 28.777 pesetas.

El estudio hace referencia también al aumento que ha sufrido el precio del agua en Madrid en los últimos años.

Así, en 1992 la catidad que gastó en agua una familia media madrileña de cinco miembros, con un consumo cercano a los 300 litros diarios, pagó 11.800 pesetas trimestrales en concepto de facturación de agua. En 1984 esa misma familia, por la misma cantida de agua, abonó solamente 5.275 pesetas.

"Entre 1984 y 1992", explicó Pedroche, "las tarifas han variado, sin contar impuestos, en 2,25 veces más. Mientras que en el 84 un metro cúbico le costaba a un madrileño 38,9 pesetas, cuatro años más tarde subía hasta las 87,68 psetas".

Finalmente, Pedroche aludió al aumento de las tarifas del agua en la Comunidad de Madrid para el presente año. "Según nuestro estudio, el consumo medio familiar puede ver incrementadas las facturas trimestrales entre 8.000 y 11.000 pesetas", concluyó.