Concretamente, según explicó Sanchís Oliver, los valencianos gastaron en 1992 alrededor de 110.000 millones de pesetas en loterías, máquinas tragaperras, bingos y casinos, lo que les coloca en tercera posición, después de madrileños y catalanes.

Representantes de comunidades autónomas que tienen transferidas las competenias en materia de juego (Galicia, Euskadi, Navarra, Cataluña, Andalucía, Canarias y Comunidad Valenciana) debatieron hoy en Alicante, junto a miembros del Ministerio del Interior y de la Comisión Nacional de Juegos, la formalización de un convenio para crear un fondo de relación y regular las políticas aplicadas a la materia.

Según José Luis Sanchís, "las máquinas de tipo B, más conocidas como tragaperras, son las preferidas por los valencianos a la hora de probar suerte en el juego, y en segundo luga se encuentran los bingos".

De los 110.000 millones de pesetas gastados en la Comunidad Valenciana el pasado año, un 35 por ciento corresponde a la provincia de Alicante, debido sobre todo a la población flotante procedente del turismo.

José Luis Sanchís consideró que, aunque no disponen de datos definitivos sobre la recaudación en este año, "se prevé una disminución de las cifras de gasto en juegos, debido a los efectos de la crisis económica"