MADRID. EL ZOO ABRE UN INVESTIGACION SOBRE LA MUERTE DE UN HOMBRE ALCANZADO POR UN RAYO

- La víctima recibió una descarga de 16.800 amperios

MADRID
SERVIMEDIA

Técnicos del Parque Zoológico de Madrid han iniciado una investigación para determinar las causas del accidente que ayer provocó la muerte de un visitante, al ser alcanzado por un rayo, según confirmaron a Servimedia fuentes del Zoo.

En la investigación se estudiará también la situación de los dos pararrayos que hay en el parque, así como las cauas del accidente que acabó con la vida de Miguel Angel Luna.

Las mismas fuentes indicaron que las circunstancias que rodearon el accidente son desconcertantes, ya que "va en contra de todo lo que tenía que haber ocurrido", dijeron.

Explicaron que no entienden cómo el rayo alcanzó a Miguel Angel Luna Luna, de 28 años, y no a alguno de los 2.000 árboles de 6 metros de altura que hay en el parque. "En teoría, cada uno de los árboles debería funcionar como pararrayos", señalaron.

Por otra parte,fuentes del Instituto Nacional de Meteorología (INM) indicaron a Servimedia que la víctima recibió una descarga de 16.800 amperios, lo que acabó con su vida de forma fulminante. Asimismo, indicaron que no existe una normativa obligatoria de medidas de protección contra tormentas eléctricas, sino sólo una serie de recomendaciones.

En este sentido, el INM recomienda en caso de tormenta no protegerse debajo de los árboles, cerrar las ventanillas del coche si se está dentro de él cuando hay tormenta, no psar en suelos húmedos o ir con calzado mojado, no salir corriendo, evitar las zonas arcillosas, agua en superficie libre, los postes y zonas metálicas. Dentro de una vivienda, se aconseja alejarse de la chimenea y de la cocina.

Por su parte, fuentes del Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente (MOPTMA) señalaron a Servimedia que la Norma Tecnológica de la Edificación, elaborada en 1973 y que regula el uso de pararrayos, no es obligatoria, sino de "recomendada observancia".

Las msmas fuentes explicaron que dicha normativa observa tres factores a tener en cuenta a la hora de proteger un edificio de las tormentas eléctricas: el riesgo de rayos en la zona, el tipo y estructura del edificio, así como el entorno que rodea a éste.

(SERVIMEDIA)
03 Oct 1994
VBR