"Las psicosis de inico en la infancia o en la adolescencia son trastornos poco comunes, y generalmente de peor pronóstico que las iniciadas en adultos", ha destacado el responsable de la Unidad de Psiquiatría de Adolescentes del hospital Gregorio Marañón, Celso Arango, durante el curso sobre trastornos psicóticos en la adolescencia que se acaba de celebrar en este centro.

Se entiende por psicosis una falta de contacto con la realidad. Con el fin de realizar un diagnóstico temprano, los psiquiatras infanto-juveniles tratande identificar varias de las siguientes señales de alerta: dificultad para diferenciar entre el mundo onírico y el real, alucinaciones, trastornos del pensamiento formal, ideas y pensamientos raros, oscilaciones frecuentes de ánimo, comportamiento extraño, ideas delirantes de persecución, regresión, ansiedad y temor severos, confusión de la televisión con la realidad, y graves problemas relacionales que incluyen dificultades para iniciar y mantener relaciones personales.

Estos trastornos suelen darse n una mayor proporción en chicos que en chicas, y parecen presentar una mayor carga genética que cuando aparecen en la edad adulta. En opinión del doctor Arango, "dada la gravedad y el posible mal pronóstico de estas enfermedades, el diagnóstico y tratamiento temprano es sumamente importante .

Los niños y jóvenes que presentan estos síntomas requieren una evaluación integral, diseñada por un equipo multidisciplinar en el que tengan cabida diferentes profesionales que mantengan contacto con el paciente Una combinación de medicamentos, terapia individual y familiar, y programas terapéuticos especializados basados en actividades escolares o deportivas son, a menudo, necesarios para el tratamiento integral de estas enfermedades.

Con el curso, los responsables de la unidad de Psiquiatría de Adolescentes han planteado la puesta al día en el tratamiento de la psicosis. Los 250 asistentes han podido escuchar a destacados expertos nacionales e internacionales, resaltando la participación de la directora de Programa de Psiquiatría del Niño y del Adolescente del Instituto de Salud Mental de Estados Unidos, Judith Rapoport, una de las figuras mundiales más sobresalientes en el ámbito de la psiquiatría infanto-juvenil.

Desde su inauguración, la Unidad de Psiquiatría ha tratado a 300 pacientes entre 12 y 17 años de edad, procedentes de diferentes países y de varias comunidades autónomas. La estancia media en la unidad es de 17 días, y las patologías más frecuentes hasta el momento son la esquizofrenia y otrs cuadros psicóticos, los trastornos disociales y de las emociones, y las depresiones y otros trastornos afectivos.