El Grupo de Delincuencia Urbana de la comisaría de Fuencarral dio con el domicilio de Maía V. como centro distribuidor de droga siguiendo la pista a los suministradores que actúan en los citados poblados. La mujer vive en la calle Jazmín, en el barrio conocido como 'el Bronx de Hortaleza'.

La policía, una vez obtenido el mandamiento judicial, se planteó el problema de entrar en la vivienda y evitar la destrucción de las pruebas. Con el pretexto de prestar un servicio público, una mujer policía llamó al timbre y le abrieron la puerta, pero, al verla, tanto María V. como sus cuatro hijos raccionaron violentamente.

Uno de los jóvenes se encerró en el cuarto de baño y arrojó al inodoro el contenido de 5 bolsas de medio kilo de heroína cada una. Al final la policía sólo pudo recuperar 225 gramos de heroína marrón, además de 13 gramos de cocaína, más de medio millón de pesetas y quilo y medio de oro en joyas.

La mujer, de 43 años, y sus dos hijas Eduvigis y Elena S.V., de 20 y 17 años, respectivamente, fueron detenidas, mientras que los otros dos hijos, menores de edad penal, fueron eviados a un colegio de la Comunidad de Madrid.

Como consecuencia del incidente, la funcionaria de policía tuvo que ser asistida de lesiones leves a consecuencia de un golpe en la cara con la puerta del cuarto de baño. La madre cuenta con dos antecedentes policiales por el mismo motivo y no vendía cantidades inferiores a los 200 gramos.