Además, el sindicato considera que esta medida conllevaría un incremento de los precios de los productos, que repercutiría directamente sobre el consumidor. Por otra parte, las grandes superficies se convertirían en un elemento de fuerte competencia con el pequeñ comercio, lo que conllevaría el cierre de muchos de ellos.

Según UGT, la medida no implica la creación de nuevos puestos de trabajo. Por el contrario, considera que se destruirían más empleos de los que se pueden generar. Las estimaciones del sindicato indican que si finalmente se aprueba la libertad de horarios en el comercio, se perderían unos 20.000 puestos de trabajo.

Además, la central sindical afirma que las condiciones de trabajo de los asalariados se deteriorarían aún más en materia de jrnada y salud laboral.

Finalmente, UGT-Madrid dice que en Europa no hay una liberalización de horarios y que se trata únicamente de una demanda corporativa de las grandes superficies.