Según informó hoy el Ayuntamiento de Madrid, la decisión ha sido adoptada tras la comparecencia ayer en el tribunal de los representantes de la corporación municipal y de la Comunidad de Madrid.

Los vecinos presentaron el pasadomes de diciembre un recurso ante este tribunal contra la resolución de la Comunidad de Madrid de incluir en el Inventario de Bienes Culturales el conjunto escultórico compuesto por el dolmen y la estatua, pero no el pavimento que lo circunda. Por este motivo, habían solicitado la paralización de las obras que realiza el ayuntamiento.

Tras la comparecencia de ayer, el TSJM ha entendido que las obras de remodelación de la plaza pueden continuar, siempre y cuando comunidad y ayuntamiento adopten las medias necesarias para que, en caso de que finalmente los tribunales den la razón a los vecinos, se reconstruya el pavimento para devolverlo a su estado original.