Ruiz Gallardó formuló este compromiso en la elección del diputado del PP Juan Van-Halen como presidente de la Asamblea, con el apoyo de los 54 diputados de su formación y otro más, frente a 48 votos en blanco de PSOE e IU y un sufragio nulo.

El pleno de la Cámara, el primero tras los resultados electorales del 28 de mayo, fue dirigido hasta la votación de los representantes de la Mesa por Fernando Utande (PP), el de más edad de la Asamblea, y Pedro Calvo (PP) y Miriam Alvarez (PSOE) los dos más jóvenes.

Los otros miembros de la Mesa elegidos han sido Pedro Núñez Morgades (PP), vicepresidente primero; Fernando Abad (PSOE), vicepresidente segundo; Jaime Ruiz (IU), vicepresidente tercero; Tomás Burgos (PP), secretario primero; Virgilio Cano (PSOE), secretario segundo, y Esther García (PP), secretaria tercera.

Tras estas votaciones, Van-Halen, ya como presidente de la Cámara, tomó juramento o promesa a los 103 parlamentarios elegidos en las urnas.

A continuación, realizó s primer discurso en el comienzo de la IV legislatura y dijo que "se hace camino al andar" y que "en los cuatro años que vamos a encontrarnos al paso han de ser significativos para esta Cámara. Por un lado, la asunción de nuevas competencias y de otro, la vieja aspiración de contar con una sede propia para nuestros trabajos parlamemntarios".

Tras recordar a sus antecesores (Ramón Espinar, Rosa Posada y Pedro Díez), afirmó que, a partir de ahora, "cuidaré expresamente el equilibrio, la flexibilidad en ls interpretaciones, la imparcialidad y el compromiso de establecer un clima que propicie el mejor servicio a los madrileños".

Al terminar el acto oficial, Alberto Ruiz-Gallardón, presidente electo de la CAM, afirmó que hoy es "un día de felicidad" por la llegada de Van-Halen a la presidencia de la Asamblea, ya que es "una persona culta y sensible".

Asimismo, expresó su voluntad de no ejercer el "rodillo parlamentario", a pesar de la mayoría absoluta del PP, y dijo que una muestra de ello es la prsencia de IU en la Mesa, que en teoría no le corresponde ningún puesto.

Jaime Lissavetzky, portavoz socialista, dijo que el PSOE hará una oposición leal y constructiva, "pero dura, y muy pegada al terreno".

Juan Antonio Candil, portavoz de IU, declaró que su grupo hará una oposición "dura" e independiente de la que haga el PSOE, acordando con uno u otro grupo iniciativas legislativas.