Se trata de la primera experiencia de España, ya que Barcelona cuenta con una docena de vehículos, pero sólo son publicitarios a medias, la 'cola' de los autobuses articulados.

Según manifestó a Servimedia el gerente de la agencia de publicidad Transpublisa, Eloy Sánchez, esta empresa tiene una lista de espera de primeras marcas para anunciarse en 30 autobuses.

El problema es que las autoridades municipales no quieren que se anuncien mensajes agresivos y están "muy senibilizadas" hacia lo que puedan pensar los ciudadanos, señaló Sánchez. Por eso, después de dos años de insistencias, el Ayuntamiento ha accedido a emplear tres vehículos durante tres meses a modo de prueba.

La otra cara de la moneda es que la EMT puede ingresar más de 250.000 pesetas al mes por cada autobús-anuncio, diez veces más que con los anuncios normales.

Un autobús-anuncio se caracteriza por estar revestido completamente del mensaje publicitario, incluidas puertas y ventanas, salvo el pararisas delantero. A diferencia de los anuncios normales en autobuses, no llevan carteles o adhesivos, sino que están completamente pintados con el mensaje publicitario.

TECNICA DE PUNTOS

Transpublisa ha adoptado un moderno sistema para pintar las ventanas basado en una técnica de puntos que deja ver el exterior desde el interior con toda claridad.

La agencia depende ahora de la autorización definitiva de la EMT, que podría aprobar la utilización de entre 25 y 50 autobuses como anuncio.

Asimsmo, Transpublisa ha propuesto al Area de Transportes Metropolitana de Barcelona la misma idea, sobre la que este organismo tiene previsto pronunciarse el próximo lunes 30. Zaragoza, Valencia y Sevilla son otras capitales que podrían adoptar los autobuses-anuncio en los próximos meses.

La agencia de publicidad corre con los gastos de pintar completamente el vehículo y volver a pintarlo con las señas de identidad del Ayuntamiento cuando acabe el plazo contratado. A cambio, la EMT debe tener el vehículosiempre en circulación y cambiarlo periódicamente de línea para que sea conocido en toda la ciudad.

El número de autobuses que se quieren pintar en Madrid, cerca del 3% de la flota, son los suficientemente pocos como para que la EMT no tema una pérdida de imagen corporativa, ya que, efectivamente, según reconoció Sánchez, los autobuses-anuncio no parecen de la EMT.